Más que verdad - veracidad
La verdad puede responder plenamente
por sí misma. La veracidad se erige sobre
relaciones. Su finalidad es que las personas
puedan confiar las unas en las otras y en sí
mismas. En situaciones críticas, tendrán que
preguntarse una y otra vez de qué modo
se puede decir la verdad. La cruda verdad
puede ser brutal e inclemente en sí misma.
¿Cuándo ya quién debe informarse abierta-
mente la situación de un enfermo grave?
Esto es algo que debe sopesarse de manera
amorosa y cuidadosa.
No es posible un juicio inequívoco
desde un principio frente a una situación
humana. Por ello, se denomina con pleno
sentido “actitudes” a las recomendaciones
de la ética mundial. No se trata de normas
rígidas, de leyes inmutables, sino de orienta
las acciones para una vida plena y buena.
Y como se trata de orientaciones que no reclaman
inequivocabilidad, nunca podrá ser claro de
antemano si el camino elegido es el correcto.
Un fracaso es perfectamente posible, incluso
el camino ha sido pensado con esmero y
cuidadosamente. Es la “actitud”, la voluntad
de ser humanos, de reconstruir los tejidos
que nos permitan volver a tener confianza,
lo que cuenta para la ética mundial.
ciertamente decir la verdad para muchos es fàcil, pero decirla con caridad para el bien del otro, es una actitud de valentìa que nos hace mejores seres humanos, porque no ayudan a remediar nuestros defectos , a dar lo mejor en todo momento,aunque requiera de sacrificios y mucha aceptación, que en estos tiempos de cuaresma es muy adecuado practicar, los que nos decimos CRISTIANOS.
